lunes, 3 de marzo de 2008

Pulpo con habichuelas blancas



Hay quien compra e pulpo cocido, en este caso no debemos olvidar pedir un poco de agua de cocción.
El mejor pulpo es el de las rías. Aconsejo comprarlo, limpiarlo sin que toque agua dulce y congelarlo. Para cocerlo es necesario descongelarlo.
Ponemos agua sin sal a hervir, no demasiada. El pulpo suelta mucha al cocer. En ella dejamos flotar un casco de cebolla.
Sosteniendo el pulpo por la cabeza lo hundimos y salvamos de las aguas tres veces. Las puntas de las patas se rizarán graciosamente. Si girásemos la mano poniendo la palma hacia arriba, el pulpo daría la vuelta cubriendo con las ocho patas la cabeza. Pues bien en esta posición lo echamos a cocer.
Debe hervir unos 25 ó 30 minutos, hay que ir pinchándolo para catarle el punto. Vigilaremos que su piel permanezca tersa, si se cuartea y desprende se está pasando de cocción.
Ponemos a escurrir las habichuelas y en una cazuela al fuego vertemos aceite de oliva y dejamos que un diente de ajo lo perfume. Ya añadimos el jamón para que se acalore.
Incorporamos las habichuelas y removemos con cuidado. Sazonamos con pimienta y vertemos un chorrito de vino blanco. Dejamos que se cueza un poco y se evapore el alcohol.
Cortamos con tijeras de cocina el pulpo en trozos no demasiado grandes y lo adjuntamos a las habichuelas con un poco de agua de cocción del pulpo. Removemos para homogenizar y dejamos hervir unos instantes, no debe quedar caldoso.

No hay comentarios: